El Toyota Celica es un automóvil que ha dejado una huella imborrable en el mundo de los rallys, especialmente gracias a las victorias de Carlos Sainz en los campeonatos mundiales. Con este vehículo, Sainz logró conquistar dos títulos mundiales, mostrando la capacidad excepcional del Celica como un coche de competición de alto rendimiento.El Celica no solo demostró su fiabilidad y resistencia en las duras condiciones de los rallys, sino que también exhibió un equilibrio impresionante entre potencia y maniobrabilidad, lo que permitió a Sainz desplegar su talento al máximo en los exigentes tramos cronometrados.La asociación entre el Toyota Celica y Carlos Sainz es un testimonio del éxito y la destreza técnica de este automóvil en el escenario mundial de los rallys. Su legado perdura como un ejemplo de la colaboración entre un piloto excepcional y un vehículo excepcional, y sigue siendo recordado con admiración por los fanáticos del automovilismo en todo el mundo.